- Área: 1100 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Nico Saieh
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Proveedores: Multicarpet, Spatii
Descripción enviada por el equipo del proyecto. JustPeople propone una forma distinta de mirar, entender y pensar las nuevas dinámicas de trabajo. Es una oportunidad de reflexionar acerca del valor del encuentro de las ideas y las personas en torno a una experiencia de trabajo colaborativa, propositiva e inspiradora. Se entiende al usuario como un adulto inteligente, curioso, reflexivo y entusiasta. El lugar propone un descubrimiento constante de detalles, guiños, pequeñas sorpresas y grandes descubrimientos. La aparente sobriedad de los muros negros, contrastan con la complejidad y el valor de los puntos de encuentro de las personas entre ellas y con el espacio, los objetos, los aromas, los sabores y las ideas. El programa, por una parte diverso, y por otra muy específico en sus requerimientos funcionales, se distribuye en dos pisos de un edificio de oficinas: el primero con acceso directo a la calle; el segundo con un amplio perímetro vidriado que baña de luz natural [casi] todos los recintos.
Abajo se agrupan los programas de condición más pública y [coincidentemente] de mayor convocatoria, como lo son el Coffee House y los Labs o talleres. El Coffee House se orienta hacia la esquina sur poniente del edificio, sobre la calle, buscando visibilidad y actuando como un referente, una invitación. Se extiende hacia el exterior con una terraza amoblada que no solo actúa como parte del café, sino como una plaza de uso público.
Hacia el interior, un foyer alargado y amplio articula la relación entre el coffee house y los talleres. Actúa como mediador entre las dinamicas más casuales y sensoriales de la cafetería, con aquellas más relfexivas y exploratorias de los Labs. Estos, en su condición de laboratorios de ideas, se trabajan desde el desarrollo de mobiliarios e intervenciones funcionales y asertivas. Un panel móvil permite variedad de configuraciones y usos entre los dos talleres principales, mientras el tercero, más pequeño se propone como un espacio de experimentación más divergente y amplio [pero contenido].
Los dos niveles no solo se conectan con una escala, sino también con una estructura modular de pino 2x2” negra que ocupa el vacío entre pisos, y se configura con su geometría, como un elemento vinculante entre ambas plantas.
Al igual que la planta baja, el segundo nivel se configura en la relación entre dos programas diversos, pero complementarios. Hacia el sur, sobre la terraza y la calle, se desarrolla el Lounge, una planta libre donde los muebles y las personas configuran diferentes situaciones de trabajo individual, colectivo, privado e informal. Hacia el norte, en cambio, se reparten 12 salas de proyecto o de reuniones con capacidad para 2, 4, 6 y 10 personas.
Además de resolver los requerimientos funcionales y de habitabilidad, se busca que el mobiliario aporte a la sensación de una experiencia única, identitaria. Por ejemplo, la pizarra, elemento continuo y recurrente, ofrece una oportunidad constante para las ideas, porque estas pueden llegar en cualquier momento, en cualquier lugar.
El compromiso con el espíritu colaborativo que tuvo cada involucrado en los procesos creativos y reflexivos del proyecto, se manifiesta en la construcción de una experiencia única, multidimensional, propositiva e inspiradora. Más nunca definitiva.
Porque al final, más allá de cualquier esfuerzo, es en el encuentro casual, en la conversación de pasillo, en la complicidad de un café, en la recurrencia de una cara, una persona, una idea, que encontramos el real valor de la experiencia compartida.